PONENCIA 13, SINDICATO MEXICANO DE ELECTRICISTAS

SINDICATO MEXICANO DE ELECTRICISTAS 

CONGRESO SOCIAL HACIA UN NUEVO CONSTITUYENTE 

 

 

 “¿CÓMO CONSTRUIR LA UNIDAD DE LOS MOVIMIENTOS SOCIALES?” 

 

 

 Noviembre 19, 2010. 

 COMO CONSTRUIR LA UNIDAD DE LOS MOVIMIENTOS SOCIALES 

Los movimientos sociales son la expresión más visible de la disconformidad y protesta de los ciudadanos, son también la vanguardia de nuevos comportamientos y actitudes.

Un movimiento social como tal, es la forma de acción colectiva, y ésta implica la preexistencia de un conflicto, de una tensión que trata de resolver haciéndole visible, dándole dimensiones a esa acción colectiva. Un movimiento busca y practica una identidad colectiva, es decir, un movimiento supone que determinada gente quiere vivir conjuntamente una distinta forma de ver, estar y actuar en el mundo.

Como consecuencia de que el Estado ha perdido la ruta en la búsqueda de su fin y su razón de ser que debería ser el bien común, es que se hacen necesarios los movimientos sociales en países como el nuestro.

Como consigna política es muy importante señalar la unidad de todos los pueblos, la unidad de todos los oprimidos, la unidad de la izquierda, la unidad de la oposición, pero en la conjugación de esfuerzos de los movimientos sociales de diversa índole y signo no es tan fácil, porque hablamos de movimientos sociales, porque hablamos de que cada actor social genera su propios movimientos, tenemos el movimiento de mujeres, el movimiento de indígenas, el movimiento de jóvenes, movimiento de jornaleros, movimiento de campesinos, movimiento de obreros, etc. y hay una diversidad de intereses aunque puedan identificar a un contrincante. En el momento actual el enemigo es Calderón; todos lo identifican como opositor, tratando de hacer algo para destituirlo, para sacarlo del poder, por echarlo a la calle; el problema ¿Cómo?

Los obreros dicen por medio de los sindicatos que son sus instrumentos de lucha; los campesinos piensan que podría ser a través de sus centrales campesinas (UTA, CNC, CAMP, UC); las mujeres que mediante las asociaciones feministas (Mujeres en pro por la decisión de las mujeres por su cuerpo, Católicas por su derecho a decidir, etc); los jóvenes a través de su grupos como los Emos, los Darks, los Punks; Algo importante de los movimientos sociales es su riqueza, su diversidad y este es también uno de los mayores problemas. 

Aunado a lo anterior, es decir a la diversidad, otro factor que consideramos relevante es el hecho de que no basta con identificar a un enemigo en común, ¿cómo hacer para avanzar? para destituirlo, sacarlo, echarlo por la puerta de atrás. 

En la etapa de lucha entre el sindicalismo oficial y el sindicalismo independiente, en donde hasta el SUTERM se convirtió en un instrumento de lucha de los trabajadores con Rafael Galván en los años 70’s, congregó a una gran cantidad de gente y los analistas pensaron que por se abriría una gran brecha para avanzar en el camino de la destitución del PRI, sin embargo, haber sacado a un partido y metido a otro no resultó en beneficios reales para la población.

En 1994, cuando surgió el EZLN y se levantó y se organizó una gran marcha en contra de Carlos Salinas de Gortari, realmente multitudinaria, como en pocas épocas se podía ver, mucha gente pensó también que se comenzaba de manera real con la liberación de México, pero no fue así. Hoy el EZLN, que en aquella época fue reivindicado por muchos sectores de la sociedad, hoy está prácticamente arrinconado en la selva; el SUTERM fue recuperado otra vez por el PRI y hoy es lo que es con los sucesores del otrora dirigente “La Güera Rodríguez”, quienes siguen siendo los caciques, los grupos que heredan, quienes tienen el control de los sindicatos que tienen gran fuerza política, pero también económica que cuando se mueven les duele, justo a donde más les duele a los ricos que es en la economía, no siendo así en el caso de algunas instituciones públicas como la UNAM que estuvo más de un año en huelga y el mundo seguía, pero que el SME o el SUTERM, o los mineros o los ferrocarrileros se declarara un año en huelga era imposible. 

Debemos tener muy claro que no podemos unificar a todos los movimientos sociales, pues también existen grupos opositores como los anarco-sindicalistas, los anarquistas, los alter mundistas, los globalifóbicos. 

Debemos motivar para construir una gran corriente social y política, haciendo énfasis primero en lo social y después en lo político, que vaya avanzando paso a paso en la constitución, en la apertura de espacios que empoderen a los grupos sociales. Hoy día los partidos políticos están muy desprestigiados. El SME tiene la intención de constituir una Agrupación Política Nacional, lo que es un intento muy importante, aunque el dilema sigue siendo no tanto el qué, sino el cómo: por afiliación, por membresía, por motivación, por simpatía, pues al día de hoy todos sentimos los estragos de la crisis y todos padecemos esa ausencia de democracia o partidocracia que es lo que existe realmente en este país. Los partidos se han apropiado y aprovechado de la democracia. Se tiene que conformar una acción social colectiva tendiente a ir sembrando las semillas de nuevas formas de organización social, pues las de ahora son ya muy conocidas. 

En los 70s surgieron grandes movimientos sociales muy importantes, con formas de organización novedosas en el país, como el caso de la Coalición Obrero, Campesina, Estudiantil del Istmo (COCEI), la  Central Independiente de Obreros Agrícolas y Campesinos (CIOAC) con las cuales se podía intuir que venían esos cambios que el país reclamaba para construir un nuevo México, sin embargo, muchas de ellas fueron corporativizadas y lo que se pensó que podría generar una gran efervescencia social, solo lo fue al principio. Se generaron muchas expectativas, desafortunadamente el régimen logró contenerlas y controlarlas. Hoy en el sistema del PAN se han utilizado las mismas estrategias del PRI, corporativizando, mandando dinero a las organizaciones, porque esta es una manera de tenerlas contentas, pero conteniéndolas y controlándolas, pero más que a las organizaciones a los líderes, ¿dónde están los líderes ahora? algunos ya están en el aparato: de diputado a senador, de senador a asambleísta, de asambleísta a delegado, y ¿dónde está esa izquierda?

El SME y todas las organizaciones sociales que se manejen en el mismo sentido de valores y principios sociales, tenemos un buen reto, porque tenemos historia que lo avala, aunque también parte de ella lo condena al haberse mantenido a la zaga de los movimientos sindicales por una concepción muy gremialista. 

El reto es como echar a andar, motivar, facilitar a todos esos sectores descontentos e iniciar una gran corriente social y política que de en los tintes de nuevas maneras de ver la política. Muchos de los que han analizado y trabajado el México de los últimos años, vieron como una gran oportunidad la conjugación de las fuerzas del campo y la ciudad como es el caso de la Unión Obrero, Campesina, Estudiantil, estas fueron importantes en algunos momentos y tuvieron grandes logros, sin embargo los paradigmas ideológicos y políticos se han esfumado, el marxismo, la lucha de clases, ya no son reivindicados por muchos, donde los horizontes del futuro son muy inciertos. ¿Cómo animar a la gente a pensar que pueda haber un nuevo futuro posible?

La democracia ahora es un espejismo y no funciona, antes se hablaba de derrotar al PRI, se logró y no pasó nada, ahora se pretende derrotar al PAN y luego ¿Qué? El sistema es pragmático. Los priistas ahora son candidatos perredistas, la democracia se ha corrompido, se ha prostituido. 

Para animar a la población hay que dibujar nuevos horizontes, para generar nuevas expectativas, como lo hizo el zapatismo con Marcos, con el discurso, con imágenes, que tuvo momentos importantísimos. Ahora lo que falta es imaginación, creatividad, para animar a todos los sectores sociales descontentos en la posibilidad de un futuro distinto.

No hay quien diga una fórmula mágica.

La convocatoria de un nuevo constituyente se ha aplicado en países de América del Sur como Ecuador y Bolivia, demandado por los indígenas, quienes la han hecho propia, toda vez que nunca habían sido reconocidos en sus más elementales derechos. 

Lo que se requiere no es reformar al Estado, sino reconstituir al estado con una nueva constitución que contemple a los indios como parte de la Nación. Si se explota esa beta, sucede como lo acontecido con Marcos, que llegó a la Cámara de Diputados en la que PAN, PRI, PRD se aliaron para impedir que las reformas indígenas llegaran plenas como las tenían pensadas los de la COCOPA.

La idea de un nuevo constituyente es una demanda muy importante para muchos sectores pero principalmente para los pueblos indígenas, porque ahí ellos buscarían ser reconocidos por parte del Estado Nacional.

La consigna de un nuevo constituyente es muy  oportuna políticamente en este momento, pues de qué sirve que tengamos una constitución con todos los artículos que fueron resultado de una revuelta armada donde se consagraron derechos sociales, derechos políticos, que no se cumplen o son sustituidos o reprobados para ir para atrás. El artículo 27 se reformó y ahora ya no hay tierras que repartir, los derechos laborales están siendo conculcados y no hay más; la educación es un desastre. Una buena consigna es la convocatoria a un nuevo constituyente, habrá que hacer una labor de base con la principales organizaciones como: el Congreso Nacional Indígena, La Otra Campaña, el EZLN, ONG’s con el planteamiento de construir nuevos horizontes, no más de lo mismo, con el riesgo tal vez de tropezar pero siempre por supuesto ir hacia adelante, no hacia atrás como lo están planteando las reformas actuales en el PAN.

Debemos ser claros en la pretensión y diferenciar si queremos en este planteamiento a simpatizantes o a militantes. El militante se aplica y obliga a participar activamente en la causa; el simpatizante es afín a la causa pero no se mueve, apoya con los planteamientos generales como votos de castigo, si se le pide que no tome el metrobús, que apague la luz, se traduce en acciones ciudadanas, incluso se debe tomar en cuenta a los escépticos, con algo novedoso.

La consigna es buena, pues la constitución de 1917 prácticamente está borrada, pero moverlos con algo novedoso y encausar la molestia que es en contra de todos los actores políticos, trabajando desde abajo, con las bases, pues los de arriba ya no se mueven y hacen todo para que la gente no se mueva. 

Muy lamentablemente, en el México actual, el Estado sirve más a los intereses de particulares que a los de la sociedad y se puede afirmar que el Estado mexicano se ha pervertido y en consecuencia es necesario que desde la población civil surjan actores y movimientos sociales que pongan sobre la mesa las demandas de la gente a través de la organización  y movilización.

Cómo lograr la unidad.

De primera intención, es necesario identificar las particularidades propias de cada movimiento social, con el objeto de que ninguno pierda su esencia, involucrando e interactuando unos con otros de manera solidaria en las causas de todos y cada uno de los mismos a través de la empatía. Encontrar de manera clara, cuáles son los motores de cada actor desarrollando la unidad y asegurando con ello la existencia de la organización nacional. Todos los movimientos sociales necesitan análisis de las causas que lo generan de frente a su problemática y encontrar soluciones de forma y fondo y no solo en el discurso político de campaña.

Aunado a lo anterior, a continuación se plantean factores que a nuestra consideración pueden abonar en la unificación de los movimientos sociales:

Reforzamiento de principios y valores morales y éticos individuales y colectivos impulsados desde la célula más pequeña de la sociedad que es la familia, tales como la solidaridad, la honestidad, la humildad, la generosidad, la empatía.
La construcción de la unidad real y verdadera a través de la identificación de las necesidades de los movimientos sociales, en un ámbito de empatía basado en la inclusión y respeto de todos los sectores de la sociedad (indígena, obrero, campesino, estudiantil) impulsando la militancia de sus integrantes.
Asistencia sin excepción de todos y cada uno de los representantes de los movimientos sociales a fin de establecer compromisos que se puedan cumplir a corto, mediano y largo plazo.
Participación de las bases de los movimientos sociales en la toma de decisiones desde su propia organización para fortalecer la confianza en las mismas de manera individual y colectiva.
Compromiso permanente de los dirigentes de los diversos movimientos sociales en la participación de manera permanente hasta lograr el objetivo de la colectividad.
Promover de manera inflexible el cumplimiento de la Constitución, las leyes y reglamentos que de ella emanen, asumiendo el compromiso de derogar de manera inmediata aquellas leyes reglamentarias que sean contrarias a la Carta Magna y que perjudiquen el interés colectivo.
Impulsar una campaña anticorrupción sin excepción, promoviendo penas ejemplares a todos aquellos que con sus actos u omisiones dispongan de los recursos públicos o privados en beneficio personal o de terceros.
Apertura de espacios para la población civil en radio, televisión y prensa en la misma cantidad y calidad con la que el Estado dispone para la ejecución de debates públicos y transmisión de información de un punto de vista no gubernamental.
Contratar agencia publicitaria de la mejor calidad para la promoción de los fines que se persiguen a través del Nuevo Constituyente, proponiendo como premisa fundamental la difusión a nivel nacional de la información de manera clara y objetiva con la rapidez necesaria.
Movilización organizada y colectiva, promoviendo desechar el exceso de confianza.
Integración de una Comisión Ejecutiva de Seguimiento a fin de dar continuidad a todos los acuerdos y actividades  aprobados de manera ágil hasta lograr el objetivo.
Crear un fondo que tenga por objeto el financiamiento de todas y cada una de las actividades acordadas por el Nuevo Constituyente.

F R A T E R N A L M E N T E

“Por el Derecho y la Justicia del Trabajador”

México, D.F., a 19 de noviembre de 2010. 

Coordinador SME 

Pipino Cuevas Velázquez 

Comisión de Trabajo de Oficinistas Varios

Roberto Requena Reyes     David H. Colin Sánchez

Julio Cesar Corona Ruiz        Adriana de la Rosa López      

Adrián Cervantes Pérez         Gloria Ibañez Romero

Ma. Isabel de la Rosa L.         Ma. Leticia Ramírez Ochoa

Ricardo Cruz Espinoza           Ma. de Lourdes Rincón V.

Elvira Ma. Huerta Hdez.              Juan Carlos Elizalde Carrillo